Views
4 years ago

21 - LM Zieher, LR Guelman - Agosto 2003

  • Text
  • Conducta
  • Recompensa
  • Alimentos
  • Receptores
  • Consumo
  • Etanol
  • Conductas
  • Alimentaria
  • Circuitos
  • Alimento
Mecanismos hedónicos en la regulación de la alimentación y su interacción con los reguladores homeostáticos

indica que los péptidos

indica que los péptidos opioides contribuyen a reforzar tanto el carácter del alimento como su valor hedónico, independientemente de las necesidades metabólicas del individuo. Sin embargo, luego del ayuno o la insuficiencia energética, la presión de los mecanismos homeostáticos supera a la de los sistemas hedónicos y la recompensa asociada. Circuito de recompensa (11) El centro neurálgico del circuito de la gratificación (reward) a nivel de los ganglios de la base (GB) es el nucleus accumbens (NAc) del estriado ventral con su mayor aferencia dopaminérgica que proviene del área tegmental ventral (ATV). A su vez, a nivel cortical, la corteza prefrontal (CPF) la corteza órbitofrontal (COF) y la corteza cingulada anterior (CCA) son estructuras que funcionan en conjunto con el estriado (nivel subcortical). De ello se deduce que el NAc opera como un articulador de eventos emocionales; recibe aferencias de cortezas de asociación. Las señales pueden comenzar en la COF y CCA, alcanzando la corteza (shell) del NAc. De ahí, las eferencias se dirigen al pálido y desde allí a las cortezas motoras, conectando con el núcleo del NAc que liga con el estriado motor (dorsal). La CCA monitorea si un estímulo determinado es capaz de generar gratificación (reward) en el animal expuesto a la sustancia de abuso potencial. La CPF se activa cuando el animal se encuentra ante una vivencia de gratificación y simultáneamente se activa el estriado dorsal, el área suplementaria motora (ASM) y la corteza motora (CM) que programan, secuencian y ejecutan las acciones tendientes al consumo y el contexto en que se realiza. El estriado ventral (NAc) es el partícipe fundamental de la vivencia de gratificación, dado que es el mayor receptor de las aferencias dopaminérgicas del ATV y las glutamatérgicas provenientes de la amígdala, el hipocampo y la CPF. Las aferencias dopaminérgicas provenientes del ATV liberan dopamina (DA), la que al incrementarse en el NAc genera la vivencia de gratificación, la búsqueda (seeking) y los componentes aversivos involucrados con el consumo particular. La DA vía receptores D 1 tiende a inhibir la neurona GABAérgica del tipo MSSN (tamaño mediano espinosa) GABA-dinorfínica, mientras que las aferencias glutamatérgicas estimulan la neurona inhibitoria GABAérgica, lo que modula el efecto neto de la aferencia dopaminérgica. En ese sentido, el reclutamiento de receptores AMPA potencia y refuerza la activación de receptores NMDA. Si la CPF decide la extinción de la conducta de abuso, lo hace activamente a través de la síntesis de subunidades R 1 y R 2 del receptor AMPA y su reclutamiento a nivel de la densidad postsináptica en el NAc, lo que cambia el cociente de receptores NMDA/AMPA (Figura 2). Así, la extinción activa de la conducta aumenta la inhibición del pálido ventral por las neuronas MSSN-GABA- Dyn del NAc, con lo que disminuye tanto el consumo como la conducta de búsqueda. Otro mecanismo que se opone a la acción de la DA en el NAc es una retroalimentación negativa por un axón recurrente de las MSSN-GABA-Dyn cuyo neurotransmisor es la dinorfina y frena la liberación de DA por activación de receptores a opioides de tipo kappa (KOP) (Figura 3). Este es el sitio de acción de la buprenorfina, agonista de receptores KOP, empleada en los tratamientos de deshabituación. Sistemas dopaminérgicos, serotonérgicos y opioides en la gratificación alimentaria Si bien en un comienzo se especuló que el NAc no participaba en la conducta de recompensa (reward) a alimentos, evidencias más modernas argumentan a favor de la contribución dopaminérgica a la gratificación por alimentos. Los ratones genéticamente incapaces de producir DA mueren por inanición pero recuperan la conducta de alimentación si se les introduce el gen de la tirosina-hidroxilasa (enzima de síntesis de la DA) en el caudado-puta- FIGURA 3 Referencias dopamina - KOP receptor para opioides subtipo kappa - ATV: área tegmental ventral dinorfina - D 1: receptor dopaminérgico subtipo 1 - NAc: nucleus accumbens

men y sólo parcialmente si se lo introduce en el NAc. Las conductas alimentarias son inducidas muy potentemente por inyecciones en el NAc de: - Agonistas opioides - Agonistas GABA - Antagonistas glutamatérgicos - Nociceptina Estas inyecciones incrementaron de preferencia el consumo de comidas palatables como los alimentos dulces, salados y grasos versus los no palatables o el agua, lo que indica que el aumento de la ingesta no refleja solo un aumento de la actividad motora, sino una elección alimentaria. Los antagonistas de receptores a opioides de tipo mu (MOP) y kappa (KOP) inyectados en el NAc inhibieron la conducta de ingesta de sucrosa (más que la de alimentos menos palatables). Por consiguiente, los circuitos del NAc juegan un rol modulatorio importante, particularmente en promover el consumo de alimentos deseables. El NAc tiene extensas interacciones recíprocas con el hipotálamo lateral (HLA), que interviene en la regulación de la conducta alimentaria. A su vez, la principal eferencia del NAc (GABAérgica) es el pálido ventral, que es también GABAérgico y proyecta al HLA. Por ello, el NAc puede desinhibir las neuronas del HLA (Figura 2). La alimentación inducida por antagonistas GABA en el NAc es bloqueada por antagonistas GABA en el pálido ventral y por agonistas GABA en el HLA. Inversamente, la ingesta alimentaria inducida por estimulación del HLA puede ser bloqueada por antagonistas dopaminérgicos, lo que sugiere un rol crítico de los circuitos estriatales en la expresión de la conducta alimentaria. Dados los altos niveles del ARNm para la hormona concentradora de melanina (MCH) y de sus sitios receptores en el NAc (y la ausencia de sitios para orexina), se sugiere un rol importante para la MCH en la relación NAc-HLA. Así, la MCH que aclara la piel coincidiendo con los períodos de alimentación en los animales, permitiendo que se mimeticen con el medio ambiente, es un neuropéptido promotor del apetito que aumenta de 2 a 3 veces en ratones ob/ob (ratones genéticamente obesos con una mutación en el gen de la leptina) y su aumentada expresión colabora con la obesidad y la resistencia a la insulina. Es producida en el HLA, la región perifornical y la zona incerta. Su expresión disminuye con el ayuno y la deficiencia de leptina. La hormona concentradora de melanina es agonista de receptores MCH y antagonista de receptores MC 4 . Los ratones con knock out (K.O.) del gen MCH disminuyen su alimentación nocturna. Las áreas de procesamiento sensorial del gusto (área 43 de Brodman u opérculo rolándico) y del olfato que intervienen en el control hedónico de la alimentación se conectan con el HLA. Cuando la persona está saciada, el nivel de hormona MCH es mínimo. La olfacción de un alimento rico gatilla su liberación ("pizza effect"). Esto, a su vez, repercute en el NAc que procesa la respuesta de gratificación, en combinación con otras áreas corticales de asociación y la CPF. La noción de que la DA es el neurotransmisor que confiere valor hedónico al alimento ha sido modificada por experiencias más recientes. Estas demuestran que la función de la DA está más relacionada con la novedad, atención o anticipación más que al impacto hedónico de la recompensa propiamente dicha. En este sentido se rescata la noción de la vía meso-limbo-cortical dopaminérgica como el sistema (comando) curiosidad-interés-expectativa, tal como lo definiera Panksepp. Se activa solamente en conductas dirigidas a alcanzar un objetivo y no cuando el alimento es dado ad libitum. Sistemas no dopaminérgicos también contribuyen de manera importante al valor gratificante y al impacto hedónico del alimento. La serotonina (5-HT) influencia notoriamente la conducta alimentaria y el estado afectivo y posee importantes efectos modulatorios en los circuitos de recompensa y las conductas motivadas. Vía receptores 5-HT 2C , la serotonina influencia directamente las neuronas productoras de pro-opiomelanocortina (POMC) del núcleo arcuato, precursor de la alfa melanocito estimulante ( -MSH). Estas, por su parte, no sólo liberan a-MSH, sino también ß-endorfinas que actúan sobre receptores opioides. Los opioides, por su parte, poseen un rol prominente en el estriado ventral para regular la conducta alimentaria, pero dada la muy amplia distribución de neuronas opioidérgicas en otras áreas del cerebro (como el hipotálamo) sus roles específicos son difíciles de discernir. Los canabinoides endógenos influencian sustantivamente tanto el apetito como la gratificación en ratas y humanos, pero sus mecanismos de acción son poco conocidos. Interacción de aspectos hedónicos y homeostáticos en la alimentación Los efectos gratificantes del alimento son modulados por los estados internos del animal, como son los indicadores homeostáticos de saciedad. Así, la leptina inhibe las respuestas de los receptores sensibles al dulce en la lengua, actuando en el sentido de

Biblioteca

Av. García del Río 2585 Piso 12 A - C.A.B.A
+54 11 2092 1646 | info@sciens.com.ar

Editorial Sciens, Todos los Derechos Reservados 2015