Views
8 years ago

Cocaína

  • Text
  • Cocaina
  • Consumo
  • Cocaine
  • Sustancias
  • Trastornos
  • Serebrisky
  • Tratamiento
  • Desacuerdo
  • Trastorno
  • Efectos
  • Abstinencia
Trastornos por sustancias - Cocaína

Introducción Capítulo

Introducción Capítulo 1 Débora Serebrisky Composición química La cocaína (benzoilmetilecgonina) es un alcaloide tropano cristalino que se obtiene de las hojas de la planta del arbusto erithroxylon coca, originario de América del Sur y utilizada desde la antigüedad con fines mágico-religiosos, médicos y como estimulante por poblaciones indígenas. Tras el descubrimiento de América se fue extendiendo su conocimiento y utilización hasta llegar al momento actual en que constituye una de las principales drogas de abuso a nivel mundial. Su nombre proviene del nombre de la planta coca, además del sufijo alcaloide - ina, formando cocaína. Es un estimulante del sistema nervioso central, con acción supresora del apetito, y anestésico tópico. Específicamente, es un inhibidor de la recaptación de serotonina-norepinefrinadopamina (también conocido como un inhibidor de la recaptación triple - TRI), que media en la funcionalidad de estos neurotransmisores como un ligando de transportador de catecolamina exógeno. Es altamente adictiva debido a la forma en que afecta el sistema de recompensa mesolímbico. Historia La cocaína no es una droga nueva. Las hojas de la coca, de donde se obtiene la cocaína, se han ingerido durante miles de años, mientras que la sustancia química pura, el clorhidrato de cocaína, se ha consumido por más de 100 años. Tres mil años antes del nacimiento de Cristo, los antiguos incas en los Andes mascaban hojas de coca para acelerar el latido de sus corazones y de su respiración y contrarrestar, de esta manera, los efectos de vivir escasos de aire de las montañas. Los nativos peruanos mascaban hojas de coca solo durante ceremonias religiosas. Este tabú se violó cuando los soldados españoles invadieron Perú en 1532. Los indios que trabajaban a la fuerza en las minas de plata españolas eran mantenidos con suministros de hojas de coca, porque así eran más fáciles de controlar y explotar. Usos médicos La cocaína fue sintetizada por primera vez (extraída de las hojas de la coca) en 1859 por el químico alemán Albert Niemann, pero recién comenzó a popularizarse en la comunidad médica en 1880. A principios del siglo XX, la cocaína purificada se convirtió en el principio activo básico que se empleaba en la mayoría de los tónicos y elíxires creados para tratar una gran variedad de enfermedades. En la actualidad, se sigue empleando como anestésico local en EDITORIAL SCIENS 9

D Serebrisky // Trastornos por sustancias - Cocaína ciertos tipos de cirugías de los ojos, oídos y garganta. El famoso psicoanalista austríaco Sigmund Freud fue el primero en promover el uso de la cocaína en forma general como un tónico para curar la depresión y la impotencia sexual. En 1884, publicó un artículo titulado “Über Coca” (Sobre la coca) en el cual promovía los “beneficios” de la cocaína, llamándola una sustancia “mágica”. Freud, sin embargo, no era un observador objetivo. Consumía cocaína regularmente, la prescribía a su novia y a su mejor amigo y la recomendaba para uso general. Aunque observó que la cocaína había conducido a la “decadencia física y moral”, Freud continuó promoviendo la cocaína entre sus amigos cercanos, uno de los cuales terminó sufriendo de alucinaciones paranoicas con “serpientes blancas que se arrastraban por su piel”. En 1885, escribió sus “Notas sobre el ansia de cocaína y el miedo a la cocaína” en las que matizaba su opinión acerca del “carácter inofensivo” que había atribuido a la cocaína en su primera publicación (Freud, 1975). Popularización de su uso En 1886, la droga logró mayor popularidad cuando John Pemberton incluyó las hojas de coca como ingrediente en su nuevo refresco: la Coca Cola. Los efectos eufóricos y vigorizantes sobre el consumidor ayudaron a elevar la popularidad de la Coca Cola a comienzos de siglo. La primera descripción clínica completa de la cocainomanía fue publicada por Erlenmeyer (1885) durante la denominada “primera epidemia” de consumo de cocaína que tuvo lugar a finales del siglo XIX. Durante la llamada “segunda epidemia” que tuvo lugar entre 1920 y 1930, el médico alemán Meyer (1925) describió detalladamente las características clínicas de la psicosis cocaínica. Otros autores como Claude (1933) y Caballero (1998) también realizaron descripciones completas y minuciosas de la cocainomanía y de la psicosis cocaínica, a lo largo de la primera mitad del siglo XX. Sin embargo, a principios de los años 1980 la cocaína era considerada como una “droga poco peligrosa”. Después de la Segunda Guerra Mundial y hasta bien entrados los años 70 su uso era limitado y elitista lo que contribuyó seguramente a mantener esta idea de inocuidad o de baja peligrosidad de la cocaína. Incluso en ámbitos profesionales especializados y en la literatura psiquiátrica más prestigiosa (por ejemplo, en el capítulo de Grinspoon y Bakalar del Tratado de Psiquiatría de Freedman, Kaplan y Sadock de 1980) la cocaína no se asociaba a problemas médicos graves, salvo en casos extremos que se suponían infrecuentes. A partir de 1980, sin embargo, la eclosión de la denominada “tercera epidemia” en EE.UU. reveló la existencia de graves problemas sanitarios y sociales asociados al consumo de cocaína (Jekel y cols., 1986). La investigación neurobiológica, epidemiológica y clínica sobre la cocaína, realizada desde entonces, apoya la existencia y la particularidad de las entidades clínico-biológicas de “abuso” y “dependencia” de cocaína. Ambos trastornos son el resultado de una disregulación cerebral compleja que cursa con una expresión conductual, psicológica y neurofisiológica características (alteración del estado de ánimo, del impulso a consumir y de las funciones cerebrales ejecutivas). 10

Biblioteca

Av. García del Río 2585 Piso 12 A - C.A.B.A
+54 11 2092 1646 | info@sciens.com.ar

Editorial Sciens, Todos los Derechos Reservados 2015