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Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

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Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

L Sarubbo //

L Sarubbo // Prescripción de psicofármacos, indicaciones terapéuticas vs. iatrogenia Tabla 1 1. Las particularidades de cada paciente. 2. La elección se hará sobre la base de la valoración clínica, psiquiátrica y paraclínica que descarte posibles causas sistémicas de los síntomas. 3. Se deberán evaluar las comorbilidades que tenga el paciente; ya que la incidencia es recíproca entre ellas. 4. Se tendrá en cuenta otras medicaciones que esté recibiendo, incluidas las hierbas medicinales, para descartar posibles interacciones medicamentosas y reacciones adversas. 5. Se evaluará la dieta. 6. Se suspenderá la medicación que no sea necesaria. 7. Se seleccionará y administrará la medicación con cautela, teniendo en cuenta siempre el uso racional. 8. Se deberá optimizar el tratamiento con la dosis mínima efectiva y con la menor cantidad de medicamentos posibles. 9. Se le explicarán los posibles efectos adversos o colaterales en detalle y con palabras simples. 10. Se continuará el tratamiento hasta que se alcance la dosis efectiva o aparezcan efectos secundarios. 11. Los cambios de dosis solo deberán hacerse luego de haber alcanzado 5 veces la vida media de la medicación principal y de los metabolitos activos (tiempo en que se logra una concentración estable en sangre). 12. Se evaluará la respuesta ante estos cambios. 13. Se reevaluará la medicación con periodicidad. 14. Se deberá solicitar al paciente o familiar el retiro de la casa de los fármacos que no se utilizan. 15. Se considerará el costo económico para evitar el abandono del tratamiento. Modificado de Kabanchik A. “Actualización y generalidades del uso de psicofármacos en geriatría”, 2013. EDITORIAL SCIENS 21

A Sánchez Toranzo y F Hansen // Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z portamiento del sujeto (psicofármaco). Siempre que se elija la administración de tal o cual medicamento deberemos de tener en cuenta los puntos detallados en la tabla 1. El costo económico del tratamiento no es menor. Al evaluar que medicamento está indicado en un paciente que consulta por primera vez es importante tener en cuenta este aspecto, no solo en lo que respecta a la medicación sino también de todo lo que implica sostener el tratamiento. Es necesario incluir en esta evaluación, el costo de los honorarios de todos los profesionales que intervienen, ya sea acompañantes terapéuticos, psicólogos, otros médicos además del psiquiatra, los eventuales estudios complementarios, el traslado, la frecuencia de las consultas así como el tiempo aproximado de su duración. Indudablemente al no tener en cuenta estos factores se corre un serio riesgo de incumplimiento del tratamiento indicado. Al prescribir una medicación, siempre recordemos los principios de la ética y uso racional de los psicofármacos, que son los enumerados en la tabla 2. Uso, abuso y dependencia de los medicamentos La prescripción de un medicamento conlleva otro riesgo en potencia y es el de abuso de esa medicación, lo que algunos autores denominan “uso no médico”. Cuando hablamos de abuso, nos referimos a la auto-administración de un medicamento u otro químico que lleva a efectos que generan un deterioro en la salud física y mental de la persona que lo realiza, o en el bienestar de otros. Se considera abuso a un patrón de uso patológico que produce consecuencias sociales adversas repetidas, tales como; la incapacidad de cumplir con las obligaciones laborales, familiares o curriculares, conflictos interpersonales o problemas legales, pudiendo o no llevarlo a la dependencia. Es dependencia cuando involucra procesos fisiológicos, mientras que el abuso habla de una interacción entre quien abusa de sustancias, la sustancia y la sociedad. La dependencia requiere del desarrollo de una tolerancia fisiológica a la sustancia, que comprende el tener que aumentar la dosis para prevenir los síntomas que constituyen el síndrome de abstinencia La dependencia casi siempre implica el abuso, pero el abuso ocurre, frecuentemente, sin dependencia. El abuso de medicamentos de prescripción se da sobre todo cuando estos tienen propiedades psicoactivas. Se define como su utilización de una manera distinta a la forma o en las cantidades a la prescripta por el médico, o cuando fueron recetados para otra persona. De hecho, después de la marihuana y el alcohol, los medicamentos con o sin prescripción médica son las sustancias que con más frecuencia se usan en forma abusiva (Quinta encuesta nacional en hogares sobre consumo de drogas, Uruguay 2012). En Latinoamérica, Uruguay y Argentina en este orden, ocupan el segundo y tercer lugar en consumo de medicamentos de prescripción seguidos de Chile y precedidos por Venezuela que ocupa el primer 22

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