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Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

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Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

L Sarubbo //

L Sarubbo // Prescripción de psicofármacos, indicaciones terapéuticas vs. iatrogenia Tabla 2 1. Usar el mejor recurso medicamentoso disponible; esto es, aquel que posea el mejor índice beneficio / riesgo. 2. Usar un solo medicamento por vez, o bien, el menor número de medicamentos imprescindibles. 3. Usar la dosificación (siempre en rango terapéutico) durante el tiempo necesario en que debe administrarse el medicamento, así como su asociación adecuada en tiempo y forma con procedimientos psicoterapéuticos. 4. Lograr la aceptación del paciente al régimen instituido (compliance) a los efectos de obtener los mejores resultados posibles. 5. En caso de suspensión de la medicación, hacerlo adecuadamente en tiempo y oportunidad (ya sea para su disminución o sustitución) previendo, en todos los casos la indicación, si fuera necesario, de medicación de rescate. 6. Recordar la obligación ética de comunicar al Sistema de Farmacovigilancia los eventos adversos. 7. Tener presente que el correcto diagnóstico en psiquiatría es clínico, y la elección del medicamento a utilizar se basará en sus propiedades farmacodinámicas y farmacocinéticas. 8. No utilizar psicofármacos con propósitos represivos (violencia farmacológica), para obtener ventajas deportivas o con objetivos centrados en el engaño respecto a las propiedades terapéuticas. Los medicamentos son herramientas que el médico usa para PREVENIR, TRATAR, o DIAGNOSTICAR las enfermedades de los seres humanos entendidos como “personas”. Modificado de Prof. Dr. Zieher y col.; Psiconeurofarmacología clínica y sus bases neurocientíficas, 2003. EDITORIAL SCIENS 23

A Sánchez Toranzo y F Hansen // Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z lugar. Los medicamentos de prescripción que con más frecuencia se usan en forma abusiva son: los analgésicos opioides; los estimulantes, sobre todo el metilfenidato y el modafinilo (usados para mejorar el rendimiento intelectual); y los depresores del Sistema Nervioso Central (SNC) como los ansiolíticos, y entre ellos sobre todo las benzodiacepinas. De los medicamentos que se venden sin prescripción médica los utilizados con más frecuencia son; los medicamentos para la tos y el resfrío que contienen dextrometorfano. Con respecto a las benzodiacepinas (BZD), estudios internacionales reportan un elevado incremento en su consumo en los últimos años. Las benzodiacepinas es el grupo de medicamentos más prescriptos en la práctica médica general, ubicándose dentro de los primeros lugares en la venta de todos los medicamentos que se comercializan. La percepción de su bajo riesgo, y por ser de eficacia rápida en la respuesta ansiolítica e inductora del dormir han contribuido a este aumento con el consecuente riesgo de una mayor incidencia de efectos adversos. Dentro de ellos y por su importancia, se destacan: somnolencia, excesiva sedación (fundamentalmente en adultos mayores con el riesgo de caídas), mareos, temblor, debilidad muscular, falta de coordinación y concentración, trastornos mnésicos, embotamiento, depresión, disartria–ataxia, reacciones paradojales, retención urinaria, hipertensión ocular, galactorrea–amenorrea, trastornos de la sexualidad, aumento de riesgo de accidentes (de tránsito, domésticos y de trabajo), alta tasa de mortalidad por sobredosis (sobre todo si se combina con otros fármacos depresores del SNC), aumento de riesgo de comportamientos agresivos. Desde lo social, pueden estar vinculadas a la pérdida de empleo por alteraciones conductuales. La mayoría de los autores plantean su indicación para uso sintomático, y por un breve período de tiempo que oscila entre las 8 y 12 semanas (APA 1990). Barker en el 2004 concluye luego de la realización de un metanálisis que los sujetos que toman en forma crónica BZD tienen algunas de sus funciones cognitivas modificadas, y estas no revierten con su suspensión. Boucart en el 2007 afirma que las BZD producen alteraciones de la atención aumentando el tiempo de reacción ante un estímulo visual así como alterando la integración visuoespacial. Pompeia en el 2007 muestra que el lorazepam produce alteraciones en el razonamiento deductivo (enlentecimiento de las respuestas de razonamiento ante problemas), disminuye la discriminación perceptiva y aumenta las respuestas erróneas. Varios estudios documentan los trastornos de memoria que producen las BZD, y más específicamente cuando dichos fármacos se usan en el tratamiento de los trastornos del sueño. Pueden producir embriotoxicidad durante el embarazo por lo que no se recomienda su uso, se han descripto casos de malformaciones fetales (paladar hendido, labio leporino). Altas dosis justo antes o durante el parto pueden provocar hipotermia, hipotonía y una depresión respiratoria leve en el neonato. 24

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