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Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

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Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z

L Sarubbo //

L Sarubbo // Prescripción de psicofármacos, indicaciones terapéuticas vs. iatrogenia La administración durante el tercer trimestre del embarazo puede provocar depresión del SNC y un síndrome de abstinencia en el recién nacido. Las BZD están contraindicadas en pacientes con abuso de sustancias. La Quinta encuesta nacional en hogares sobre consumo de drogas uruguaya realizada en el 2012 muestra que el 16 % de la población estudiada ha consumido, alguna vez en su vida, tranquilizantes. De estos, el 86 % lo hizo por indicación médica, siendo solo en el 42 % de los casos un psiquiatra quien hizo la prescripción; el 42,8 % menciona al médico de medicina general como responsable, y el resto a otros especialistas. El consumo de tranquilizantes, con y sin prescripción médica es significativamente mayor en las mujeres que en los hombres para todos los rangos de edad. Alcanza al 38 % de las mujeres entre 56 y 65 años de edad. Las personas que consumieron tranquilizantes sin prescripción médica en algún momento de su vida representan el 2,2 % del total de la población bajo estudio. El consumo en el último año de tranquilizantes sin prescripción médica es declarado por el 1,1 % de la población (15.000 personas) y finalmente el consumo en el último mes es declarado por el 0,7 %. Un estudio observacional y retrospectivo del uso de benzodiacepinas (BDZ) hecho en el Uruguay en la Policlínica psiquiátrica del Hospital Vilardebó, durante el período comprendido entre agosto del 2009 a julio del 2010, utilizando como medida de consumo la dosis diaria prescripta (DDP), como la dosis media prescripta de un fármaco determinado en su principal indicación, con una muestra de 3.605 pacientes, mostró que el 87 % retiró, por prescripción, al menos una benzodiacepina y 47 % estuvieron en tratamiento con las mismas BDZ durante todo el período. La BDZ más utilizada fue el flunitrazepam (55 % - DDP 2,6), seguida por clonazepam (37 % - DDP 4,1), diazepam (21 %- DDP 21,9), lorazepam (14% - DDP 4,3), alprazolam (12 % - DDP 2,2) y bromazepam (8 % - DDP 13,2). Este estudio concluye que el consumo de BDZ está por encima de las dosis definidas internacionalmente y de estas el flunitrazepam es la que con mayor frecuencia se asocia con otra benzodiacepina (Mato M., 2012). Formas de abuso Las formas de abuso de los medicamentos con o sin prescripción médica por los usuarios, pueden ser variadas y muy difíciles de controlar e incluyen: 1. Toma de un medicamento que fue recetado para otra persona. Muchas personas comparten medicación que ha sido indicada para otro, por ejemplo, un familiar. Es frecuente ver, en la consulta, pacientes que llegan con un consumo de analgésicos que no han sido indicados para ellos. 2. Toma del medicamento en una dosis más alta o de una manera diferente a la recetada. La mayoría de los medicamentos tienen una presentación en tabletas para su administración por vía oral. Las personas que abusan de ellos, algunas veces, las trituran e inhalan el polvo o lo disuelven y se lo inyectan, evitando el primer paso de la EDITORIAL SCIENS 25

A Sánchez Toranzo y F Hansen // Trastornos por sustancias - Psicofármacos. Benzodiacepinas y drogas Z metabolización de los medicamentos (la vía digestiva). Esto produce, por aumento de su concentración a nivel sanguíneo, una rápida llegada al SNC y un efecto mayor. 3. Toma de un medicamento para un fin diferente al recetado. Todos los medicamentos mencionados (analgésicos, ansiolíticos, estimulantes) pueden producir euforia si se toman en cantidades suficientes, por lo que tomarlos con este objetivo es una de las principales razones por las cuales las personas abusan de ellos. Una situación de abuso requiere, para ser evaluada, de una visión integrada de elementos que conforman la multicausalidad de este fenómeno, en donde interviene cierta vulnerabilidad heredada a la posibilidad de su desarrollo así como componentes del contexto y de las propias características de personalidad. Reconocimiento y prevención del abuso de los medicamentos Como en toda patología, la mejor forma de tratamiento es la prevención y en ella se incluyen tres actores principales intervinientes: los médicos, sus pacientes y los farmacéuticos, que desde su lugar pueden intervenir en la identificación y en la prevención del abuso de medicamentos de prescripción. Desde los médicos Al preguntar acerca de todos los medicamentos que los pacientes usan, ya sea los de vía oral, parenteral o inhalatoria y llevar un registro pormenorizado en sus historias clínicas. Esto les permitirá reconocer que existe un problema, establecer objetivos de recuperación y buscar el tratamiento adecuado. Es importante tener en cuenta cualquier incremento rápido en la cantidad de medicamentos que el paciente necesita o si hace solicitudes frecuentes de recetas antes de la fecha programada, que puede ser un índice de abuso de la medicación. Los pacientes que tienen una dependencia a los medicamentos de prescripción, pueden ir de un profesional a otro en un esfuerzo por obtener recetas para el medicamento o los medicamentos de prescripción que consumen. Desde los pacientes Mediante medidas que les aseguren el estar usando correctamente los medicamentos que les son recetados. Siempre deben seguir las indicaciones que le fueron hechas, saber cuáles son las posibles interacciones con otros medicamentos, no dejar de tomar o cambiar el régimen de dosificación sin antes consultar con su médico y no utilizar los medicamentos de prescripción de otra persona. Deben informar, al profesional actuante de todos los medicamentos que están recibiendo, incluyendo los de no prescripción, y los suplementos dietéticos o hierbas. Los medicamentos que no se usen o que han caducado deben ser debidamente descartados. Desde los farmacéuticos Que dispensan los medicamentos, pueden ayudar a los pacientes a entender las instrucciones que se les han hecho y así 26

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