Views
5 years ago

Urgencias 5 - Episodios agudos en psicosis orgánicas crónicas

  • Text
  • Vascular
  • Parkinson
  • Psicosis
  • Sensitivo
  • Estacion
  • Dermatozoos
  • Cronicas
Urgencias en psiquiatía 5 - Episodios agudos en psicosis orgánicas crónicas

Capítulo 2 Delirio de

Capítulo 2 Delirio de los dermatozoos de Ekbom Delirio de infestación María Norma Claudia Derito Introducción Una psicosis interesante por sus características psicopatológicas y por la discusión que suscita su ubicación nosográfica, es el delirio de los dermatozoos de Ekbom (25). George Thibierge, en 1884 describió el primer caso de un trastorno al que llamó acarofobia, y que posteriormente fue designado como: dermatofobia, parasitofobia y entomofobia. Ekbom lo describe en 1938 (2). La descripción hecha por el psiquiatra alemán K. A. Ekbom en 1938, fue incluida dentro de las psicosis de la presenilidad. Sus observaciones se circunscribieron a casos de mujeres maduras de entre 45 y 65 años, que en líneas generales, presentaban concomitantemente trastornos vasculares cerebrales. Este delirio organizado alrededor de seudopercepciones, era monomorfo, delirio en sector, se conectaba a un cambio del estado anímico hacia el polo depresivo con sentimientos de desagrado, que respetaba otros segmentos de la personalidad y la vida del paciente, y rara vez aparecía formando parte de otro complejo sintomático. Desde un principio generó distintas opiniones referentes a los síntomas que la conformaban. Para algunos autores, se trataba de alucinaciones táctiles que daban lugar a ideas delirantes sobre la existencia en la superficie del cuerpo de una invasión de ectoparásitos, ácaros, que pican, muerden pinchan, arden, etc. La conducta del paciente es de eliminar estas molestias en general recurriendo al rascado, frotado, pasarse sustancias desinfectantes en la piel, provocándose autolesiones de todo tipo, especialmente por rascado y dermatitis de contacto. Se acompaña de un estado de ánimo angustioso, irritable, depresivo, con tendencia al aislamiento social. La discusión que se plantea es si se trata de una psicosis endógena independiente monomorfa, o bien forma parte de complejos sintomáticos que incluyen desde los trastornos del estado de ánimo, en especial cuadros depresivos ansiosos, psicosis preseniles, esquizofrenia, psicosis histéricas, formas hipocondríacas, etc. Trataré de esclarecer esta compleja situación (19). En 1946, Wilson y Miller introdujeron el término delirio de parasitosis (5). Ubicación nosográfica Esta particular forma de delirio fue comunicada por K.A. Ekbom en un trabajo que se llamó “Der praesenile dermatozo enwhan” que se publicó en “Acta Psychiat. Et neurol.” De Dinamarca, hoy llamada “Acta Psychiatrica Scandinavica”. Es decir que su autor, a partir de sus observaciones en mujeres mayores lo incluye dentro de los variados cuadros psicóticos que aparecen en EDITORIAL SCIENS 49

NMC Derito // Urgencias en psiquiatría. Episodios agudos en psicosis orgánicas crónicas la presenilidad (4) (8). Dentro de los delirios de la presenilidad se incluyen varios tipos, descriptos por distintos autores. Dice Alonso Fernández que los síndromes paranoides de los ancianos se adscriben a dos agrupaciones nosológicamente distintas (2): 1) los cuadros paranoides reactivos y situacionales. 2) las esquizofrenias paranoides tardías. Weitbrecht (26) afirma que en la senectud los cuadros depresivos y los involutivos demenciales orgánicos (atróficos o arterioescleróticos), también adoptan un tinte paranoide (26). Fish en 1959, comunica haber registrado en 42 casos de cuadros paranoides en sujetos de más de sesenta años. Debemos reconocer que las psicosis paranoides de la tercera edad, son entidades nosológicas que no se circunscriben a ninguna clasificación en especial, por lo que terminan incluyéndose en los círculos psicóticos vigentes a cualquier edad. Dice Alonso Fernández “No hay una psicosis específica de la presenilidad” (2). Así podemos mencionar: La paranoia involutiva de Kleist; la hiponoia de Ewald; la parafrenia de Serko; la depresión rígida de Medow (27); la melancolía involutiva de Kraepelin; la depresión agitada de Leonhard (15); las catatonías involutivas de Kraepelin y Jacobi; el delirio nihilista presenil de Weber. Gaupp habla de “estados depresivos de la edad involutiva de la vida”, Capgras sobre “Psicosis de involución presenil”, Kleist habla de “Delirios sistematizados de la involución”, Halberstad en un artículo sobre psicosis preseniles, adhiere al uso del término presenil, haciendo una reseña muy completa sobre las psicosis de esta edad (16). Entre esos cuadros de etiología desconocida se encuentra el “Delirio de los dermatozoos”, para su aparición se han citado posibles causas exógenas como arterioesclerosis cerebral, menopausia, intoxicaciones, adicciones (cocaína, marihuana, éxtasis, etc.), metabolopatías, hipertensión arterial, predisposiciones genéticas, demencias, he visto un caso que precedió a un cáncer de cabeza de páncreas (¿paraneoplásico?), etc. o bien corresponden a causas endógenas, como depresiones psicóticas o psicosis endógenas tardías (23), (11). En la actualidad persisten ciertas discrepancias en cuanto dónde situar el cuadro en el sistema clasificatorio, y se suelen incluir en la CIE-10 y DSM-IV, en los trastornos delirantes sin especificación (6), (7). En 1988 Munro describe a la psicosis monosintomáticatica como un delirio monotemático, único, fijo, en ausencia de dato alguno de esquizofrenia, trastorno afectivo primario o trastorno mental orgánico, con personalidad conservada y sin datos de deterioro psicótico, coincidiendo con la opinión de Ekbom (17), (18). Ekbom, McNamara, Bers y Conrad, Schwart ( entre otros), sostienen que lo primario es una alteración de la percepción y que el delirio es secundario a ella. Psicosis hipocondríacas monosintomáticas de Munro: 1. Las que afectan a la piel (Delirio de los dermatozoos de Ekbom). 2. Las de fealdad o deformidad corporal (Delirio dismórfico). 3. Las de feo hedor la boca y mal olor cor- 50

Biblioteca

Av. García del Río 2585 Piso 12 A - C.A.B.A
+54 11 2092 1646 | info@sciens.com.ar

Editorial Sciens, Todos los Derechos Reservados 2015