Views
3 years ago

39 - S Gobbi, G Delucchi - Junio 2020

  • Text
  • Aislamientosocial
  • Aislamiento
  • Covid
  • Delucchi
  • Gobbi
  • Psiquiatria
  • Muestra
  • Sciens
  • Editorial
  • Personas
  • Argentina
  • Cuarentena
  • Ansiedad
  • Aspo
  • Impacto
  • Salud
Reporte breve. Impacto psíquico debido al aislamiento social por Covid-19 en Argentina.

Psiquiatría N°

Psiquiatría N° 39 | Mayo 2020 También se halló que un 40.30 % estaba muy pendiente de las noticias, un 35.71 % medianamente pendiente, un 21.60 % estaba poco pendiente y solo un 2.37 %, no prestaba importancia a las noticias (Gráfico 2). Observamos en general que la preocupación por la posibilidad que falleciera algún ser querido era más frecuente que la preocupación por el contagio propio de la enfermedad (Tabla 1). Solo el 24,29 % de los participantes reportaron no tener cambios en el sueño. Del resto, un 17,58 % manifestó dormir menos, pero sin afectación en su vida cotidiana; un 20,45 % expresaron que la disminución del sueño les afecta en su desempeño diario y un 37,67 % duerme más horas (Gráfico 3). En el 2015 la OMS publicó que la prevalencia estimada de depresión anual es 4,4 % a nivel global, y 4,9 % para la región de las Américas (9). Teniendo en cuenta este valor, haber hallado que durante la cuarentena un 40,62 % de personas padecen depresión entre moderada y muy grave, es un resultado altamente alarmante (Gráfico 4). En el mencionado informe, la ansiedad en nuestra región alcanza 5,65 %, mientras que en la muestra que estudiamos alcanzó el 16,74 % moderada y 7,72 % en su forma grave y 41,43 % reportaron ansiedad leve (Gráfico 5). Discusión No podemos dejar de marcar que encontramos como limitación en este trabajo que la población relevada, en su mayoría es de un alto nivel educativo (72,73 % profesionales y estudiantes universitarios) e inferimos que pertenecen a un grupo sin grandes dificultades económicas. Estos factores han sido descriptos como protectores para el trastorno depresivo mayor (10). Más allá de la aclaración anterior, la muestra estudiada presenta un notable impacto negativo en su salud mental, presentando trastornos en el sueño tal como se han descripto en trabajos recientes (11). Enfatizamos que los niveles de ansiedad y depresión son alarmantes, a pesar de que para este trabajo tomamos al valor 10 (PHQ-9) como punto de corte para diagnóstico de depresión, dejando sin incluir el grupo categorizados como depresiones leves (puntaje 5 a 9 en la PHQ-9). Siendo que para el momento de responder la encuesta los casos positivos y las muertes eran muy escasos y transcurría un tiempo medio de cuarentena de 29 días, nos hace pensar que las repercusiones negativas tienen más que ver con el aislamiento social, más que con la pandemia en sí misma. Nos planteamos el interrogante de cuál será el impacto psíquico a medida que se extienda las ASPO y la cantidad de infectados y fallecidos aumente y pueda llegar a magnitudes aún mayores como se ha dado en China y Europa. Por todo esto, deseamos generar conciencia y alertar a las autoridades sanitarias para que las consecuencias negativas en la Salud Mental provocadas por la pandemia, como así también por el aislamiento social no queden relegados ni postergados, es decir, poner en aviso de una “posible segunda epidemia” de problemas psicológicos y psiquiátricos, y preparar a los profesionales de la atención en salud mental comunitaria para que puedan brindar una respuesta adecuada. Referencias bibliográficas • 1. Prem K, Liu Y, Russell TW, et al. The effect of control strategies to reduce social mixing on outcomes of the COVID-19 epidemic in Wuhan, China: a modeling study. Lancet Public Heal. 2020: 261-270. doi:10.1016/S2468-2667(20)30073-6. • 2. United Nations. Policy Brief: COVID-19 and the Need for Action on Mental Health EXECUTIVE SUMMAR: COVID-19 and the Need for Action on Mental Health.; 2020. • 3. Brooks, S Webster, R Smith, L Woodland, L Wessely, S Greenberg, N Rubin G. The psychological impact of quarantine and how to reduce it: rapid review of the evidence. Lancet. 2020;395(10227): 912-920. • 4. Spitzer RL, Kroenke K, Williams JBW, Löwe B. A brief measure for assessing general izedanxiety disorder: The GAD-7. Arch Intern Med. 2006;166(10): 1092-1097. doi:10.1001/archinte.166.10.1092. • 5. Zamorano E, Ruiz MA, Pardo A y col. Cultural adaptation into Spanish of the Generalized anxiety disorder-7 / GAD-7 scale as a screening tool. Health and Quality of Life Outcomes 2010, 8: 8 dot:10.1186/1477-7525-8-8. • 6. Spitzer RL, Kroenke K, Williams JBW. Validation and utility of a self-report version of PRIME-MD: The PHQ Primary Care Study. J Am Med Assoc. 1999;282(18): 1737-1744. doi:10.1001/jama.282.18.1737. • 7. Tomas Baader M, José Luis Molina F, Silvia Venezian B, et al. Validación y utilidad de la encuesta PHQ-9 (Patient Health Questionnaire) en el diagnóstico de depresión en pacientes usuarios de atención primaria en Chile. Rev Chil Neuropsiquiatr. 2012;50(1): 10-22. doi: 10.4067/ s0717-92272012000100002. • 8. Manea Laura, Gilbody Simon MD. Optimal cut-off score for diagnosing191 depression with the Patient Health Questionnaire (PHQ-9): a meta-analysis. CMAJ. 2012;21(184): 191-196. • 9. WHO. Depression and Other Common Mental Disorders. 2017. • 10. Serra Taylor JA, Irizarry-Robles CY. Factores protectores de la depresión en una muestra de adultos mayores en Puerto Rico: autoeficacia, escolaridad y otras variables sociodemográficas. Acta Colomb Psicol. 2015;18(1): 125-134. doi:10.14718/ACP.2015.18.1.12 • 11. Xue Z, Lin L, Zhang S, Gong J, Liu J, Lu J. Sleep problems and medical isolation during the SARS-CoV-2 outbreak. Sleep Med. 2020;70: 112-115. doi:10.1016/j.sleep.2020.04.014. EDITORIAL SCIENS // 13

Biblioteca

Av. García del Río 2585 Piso 12 A - C.A.B.A
+54 11 2092 1646 | info@sciens.com.ar

Editorial Sciens, Todos los Derechos Reservados 2015