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40 - D Cohen, M Rodríguez - Octubre 2006

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La relación cerebro-mente durante la actividad onírica. Neurodinámica de los sueños

Dr. Diego

Dr. Diego Cohen, Lic. Marcelo Rodríguez ceso que se iniciaría a través de estímulos activantes (arousal), de origen en el área tegmental ventral (ATV) o en la región témporo-límbica, los cuales a su vez movilizan sistemas motivacionales y emocionales. Todo el proceso finalizaría con una proyección "hacia atrás" (curso regresivo) en la forma de imágenes concretas (u otras percepciones) debido a que el polo motor se encuentra inhibido, lo que permite que los sueños no sean actuados en la realidad. El curso regresivo significa el siguiente proceso: durante los sueños, el escenario primario de acción de la vida mental cambia en sentido regresivo bajo control de estructuras frontales mediobasales y límbicas anteriores hacia sistemas ubicados a nivel posterior (región parieto-témporo-occipital) que procesan información perceptual y mnésica. El circuito se completa con dos procesos inhibitorios fundamentales: deactivación de la CPF-DL y de motoneuronas, por lo tanto explican el carácter ilógicobizarro y la ausencia de pasaje al plano motor de la mayoría de los sueños. En síntesis, Solms sostiene que el proceso onírico revierte el mecanismo de formación de conceptos y cogniciones que ocurre en la vida de vigilia, es decir en el sueño las fases de cognición concreta, conceptualización y simbolización preceden a la fase perceptual, en este sentido encuentra coincidencia con las hipótesis de Freud de "regresión topográfica" durante el sueño (1, 16). Componente instintivo en los sueños La fuerza motivacional que inicia y mantiene los procesos oníricos (el socio capitalista para la formación de sueños de acuerdo a Freud) esta relacionada con el circuito de procesamiento instintivo de orden sexual y de interacción con el ambiente (búsqueda de sentido y placer a dicha interacción). Este es un circuito hedónico, que se apoya en el concepto de seeking system (SS) sostenido por Panksepp (25, 26). Este circuito se origina en fibras dopaminérgicas (DA) que parten del área tegmental ventral (ATV) ascienden por el hipotálamo lateral, haciendo sinapsis en el núcleo de la estria terminalis, en la corteza (shell) del núcleo accumbens, y terminando en la amígdala, el giro cingular anterior y la corteza frontal. Cuando este circuito fue estimulado en humanos, éstos reportaron la sensación que algo interesante o excitante les estaba ocurriendo. Además este circuito tiene que ver con la actividad exploratoria ya que se activa frente a circunstancias ambientales que despiertan interés y curiosidad. En síntesis este circuito ejecuta las siguientes funciones: conducta dirigida a un fin e interacciones placenteras con el medio ambiente. Estas conductas resultan similares a las procesadas por el circuito hedónico de búsqueda de drogas (seeking behaviour). Desde este punto de vista resulta interesante la investigación de Colace (27) realizada en pacientes internados en una comunidad terapéutica por abuso de heroína, los mismos relataban un mayor número de sueños acerca de "usar heroína" o "buscar (seeking) e intentar fumar heroína" mientras afrontaban síntomas de abstinencia. Este autor intenta probar que los sueños implican un procesamiento motivacional− instintivo, relacionado en este caso con la abstinencia y el deseo de droga (craving). De acuerdo a Solms este circuito y sus conexiones resultan componentes fundamentales (junto con la transformación de memorias y emociones en imágenes oníricas) para que se produzcan sueños independientemente de las fases REM/no- REM. Dicho circuito representa la fuerza neurodinámica impulsora, motivacional, sin la cual no habría sueños tal como intenta comprobar Solms en pacientes con daño bifrontalmesial (una de las causas de ausencia total de sueños junto con el daño en la región parietal inferior). Las pruebas adicionales que intentan corroborar la participación de esta red neuronal en la producción de sueños son las siguientes: a) los pacientes lobotomizados durante la década del cincuenta en los que teóricamente se seccionaban las fibras dopaminérgicas que se dirigían a la región frontal, no experimentaban sueños. b) aquellos pacientes que reciben neurolépticos que inhiben fuertemente la vía dopaminergica mesolimbica-cortical reportan menor número de sueños. c) los trabajos de Solms demuestran que los pacientes con lesiones de la sustancia blanca frontal ventromesial reportan un estado de total ausencia de sueños por falta del componente motivacional que da origen a los mismos. d) los enfermos de Parkinson que reciben L-DOPA, reportan sueños más vividos y frecuentes. En síntesis, Solms sugiere que el proceso onírico en un sentido neurobiológico representa, un mecanismo “dopamine on”, independiente del mecanismo colinérgico “REM on” y pueden ocurrir sueños tanto en fase REM como no REM. Establece finalmente la siguiente hipótesis: las estructuras que regulan el sueño son no necesarias, no suficientes para que se produzca el proceso final de formación onírica (20). Conclusiones Una reinterpretación de la neurodinámica de los sueños. Visión crítica de los modelos de Hobson y Solms. Respecto de las importantes investigaciones de Hobson, se sostiene que un aspecto esencial de la teoría AIM, aquella que continua considerando a la actividad onírica y la imaginería asociada como epifenómenos de la fase REM, debería ser puesta en serias dudas de acuerdo a los datos clínicos (5, 12, 13, 14, 19, 21). El concepto que, durante los sueños, la corteza hace lo mejor de un mal trabajo, modulando nada más que un proceso azaroso de actividad cerebral, nos presenta interrogantes que se resumirían de la siguiente manera: 1) siguiendo el método propuesto por Freud hace más de cien años (recolección y compilación de múltiples sueños en el contexto clínico, observando los pensamientos de los pacientes y sentimientos acerca de los mismos y aplicando la propia reflexión del investigador) se observa: a) sueños con componentes infantiles casi inocentes pero que reflejan necesidades somáticas del soñante, ya sean actuales o pasadas de orden instintivo. b) sueños con alta carga afectiva-emocional en general bajo la forma de angustia, luego de una serie de situaciones traumáticas presentes o pasadas. c) sueños en los cuales las necesidades instintivas son cumplidas si bien bajo formas más o menos distorsionadas (el sueño representa el cumplimiento de una necesidad de orden sexual y de origen infantil). d) sueños, como por ejemplo el de la "Monografía botánica", en el cual se resumen aspectos importantes de la vida afectiva del individuo, "almacenados", en nodos de memorias emocionales, re-activados cuando se producen ciertas condiciones neuropsicológicas. Es debido a estas razones con origen en las teorías psicodinámicas que consideramos, en primer lugar, que el sueño resulta un proceso determinado por múltiples y posibles niveles de 20 // EDITORIAL SCIENS

Psicofarmacología 6:40, octubre 2006 FIGURA 2 Psicoanálisis y neurociencias en los sueños. Modelo Integrado análisis que no puede ser solamente reducido al resultado de un procesamiento caótico que lleva a cargo la corteza a partir de un serie de estímulos activantes ascendentes (Figura 2). En segundo lugar, teniendo en cuenta los autores que teorizan sobre la función biológica de los sueños (si bien no hacen una distinción importante entre el proceso de soñar en si mismo y la actividad onírica bajo la forma de diferentes percepciones), se considera que los sueños cumplen una serie de funciones las cuales resumiendo serian las siguientes: a) de acuerdo a Greenberg y sus colaboradores (28) la importante actividad mental en fase REM representa un intento de adaptación a las demandas de la vida. Dicha fase estaría involucrada en una forma de procesamiento de información, necesaria para la integración de nueva información al sistema de memoria procedural. Para estos autores, cuánto más simbólico es el contenido del sueño, mayor es la posibilidad de representar una solución a un problema. De esta manera, el sueño sirve para la organización de la memoria, el procesamiento de información y la representación de problemas que requieren cierta forma de adaptación. b) Crick, propuso en 1983 la teoría denominada "reverse learning". Para este autor, el aspecto bizarro de los sueños tiene que ver con una función "depuradora" de memorias y puede ocurrir durante la fase REM (29). Dichas memorias constituyen, de acuerdo a ciertos autores, verdaderas estrategias de supervivencia almacenadas y transmitidas filogenéticamente ya que, la fase REM y el sueño de ondas lentas aparece en todos los animales marsupiales y placentarios. c) de acuerdo a las hipótesis planteadas por Revonsuo (30), la función biológica-filogenética del sueño es estimular situaciones amenazantes cuyos orígenes se remontan a tiempos prehistóricos; dicha función, permite nuevamente representar situaciones amenazantes y preparar para las mismas. El autor toma como base los sueños de los pacientes con diagnóstico de Trastorno por Estrés Postraumático, los sueños infantiles, las pesadillas, los sueños repetidos y recurrentes y aquellos sueños con escenas de recolectores-cazadores en tiempos prehistóricos. Es debido a estos tres últimos aportes, que nos parece difícil seguir considerando a los sueños como un mero procesamiento cortical "sin significado" (33, 34). Respecto de los aportes realizados por Solms, la lectura crítica de sus trabajos e investigaciones nos conduce a pensar lo siguiente: a) si el mecanismo impulsor de los sueños tiene como principal mediador la vía dopaminergica mesolimbica-cortical (básicamente concuerda con la descripción que hace Panksepp del seeking system o SS), estos datos no encuentran correlación con las experiencias realizadas mediante Resonancia Magnética Nuclear funcional (RNMf) que muestran una desactivación selectiva de la corteza prefrontal (CPF) durante la fase REM, si bien es claro que Solms sostiene la hipótesis sobre la independencia de la producción de sueños de dicha fase. Este autor menciona en la mayoría de los trabajos que la perdida del juicio crítico que ocurre durante la actividad onírica tiene como correlato neurobiológico la menor actividad frontal. Más aún, en su ultima presentación realizada en el V Congreso Internacional de Neuropsicoanálisis (31), sostuvo que esta particularidad emparenta la actividad onírica con las psicosis. b) las pruebas que ofrece respecto de la mayor actividad dopaminergica y la presencia de mayor actividad onírica y sueños vívidos requieren mayores precisiones. En el caso de los pacientes que reciben L-Dopa, no se encuentra claramente establecido hasta que punto este precursor se transforma en noradrenalina (NA). Tampoco se establece, en la mayor parte de las investigaciones publicadas por Solms, la complejidad que reviste la neurotransmisión dopaminérgica (DA) en sus diferentes formas de liberación (tónica o fásica), de contacto sináptico o asináptico, de recaptación y de metabolización regional (32). Por último, sus trabajos tampoco hacen mención respecto de la interacción de la neurotransmisión colinergica (la cual interviene como mecanismo de la fase REM) con la neurotransmisión DA. Solms solamente sostiene (5) que la inhibición que ocurre, durante el sueño, de las partes del cerebro basal anterior (núcleo basal de Maynert, núcleo septal y "otros") debido a la actividad colinérgica de la fase REM produce un actividad alucinatoria similar a la observada en el sueño y frente a la administración de anticolinérgicos. Por lo tanto, las lesiones producidas en los núcleos mencionados (situación comprobada clínicamente por Solms, a partir del estudio de pacientes que sufrieron la ruptura de aneurismas de la arteria comunicante anterior), la utilización de drogas con mecanismo anticolinérgico central y la fase REM del sueño, todas tienen las mismas consecuencias: la inhabilidad para distinguir fantasía de realidad y la presencia de actividad alucinatoria. c) respecto de la ausencia o disminución de sueños en pacientes que reciben antipsicóticos (lo que Solms llama "lobotomía frontal química"), no existen por el momento trabajos adecuadamente diseñados que permitan comprobar dicha hipótesis. Además, para algunos autores esta hipótesis EDITORIAL SCIENS // 21

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